“Esto no puedes perdértelo”, se dice a sí mismo Alfonso, integrante de uno de los tres grupos del Programa SEPAS que dinamiza la Institución Teresiana en Córdoba. Asómate a la experiencia de cambio y vida que estos hombres y mujeres han apreciado. “Miro atrás, veo cómo estaba, cómo estoy y sólo puedo decir ¡GRACIAS!” 

¿Qué es el Programa SEPAS?

Es un programa de acompañamiento grupal para personas separadas o divorciadas. Tiene como objetivo dar respuesta, desde la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia, a las necesidades que se producen como consecuencia  de esta experiencia. El acompañamiento grupal se ha revelado como una herramienta muy eficaz para la sanación, de manera que las personas puedan recrear su vida y recuperar el dinamismo perdido desde la dimensión creyente.

SEPAS propone recorrer, en compañía de personas que han pasado por la misma situación, un itinerario que posibilite, desde la fe, cerrar heridas y reconstruir dimensiones afectadas por la separación o divorcio: relacional, emocional o reflexiva. En cada encuentro se tocan aspectos sociológicos, psicológicos y de espiritualidad a través de textos, canciones, videos y un tiempo de contemplación de algún pasaje del Evangelio. Además, se entregan materiales para el trabajo personal en casa.

Este programa se desarrolla en varias ciudades de España: los Centros Arrupe de Valencia y Alicante desde la pastoral familiar de la Compañía de Jesús; en  Cuenca y Teruel promovido por la diócesis; en Granada, Barcelona  o Málaga desde los grupos de CVX; en Córdoba, promovido por la Institución Teresiana.

Esto no puedes perdértelo

En Córdoba la Institución Teresiana inicia SEPAS en 2018. Actualmente en la ciudad hay tres grupos -uno casi terminando el proceso y otro a su inicio- que acogen a un total de 23 personas. ¿Qué significa para ellas?

“Cuando estoy en casa me da pereza salir para venir a la reunión, pero al recodar el bien que me hace escuchar,  compartir las experiencias, contemplar los textos del Evangelio, así como escuchar las orientaciones de los facilitadores… me levanto y me voy para La Plaza de la Concha, nuestra posada -así es como se denomina en el programa al lugar de las reuniones-. Al acabar, salgo tan bien del encuentro que me digo: esto no puedes perdértelo. Siento que Dios mismo se hace presente y ¡me da tanta paz…!

Alfonso

“Hace mucho de mi divorcio, 20 años; pero asistir a las reuniones me aporta tanto que no dejo pasar ni una. El clima de escucha, la profundidad de lo que se comparte, ver y sentir la sanación de las heridas… es un estímulo.”

Carmen

Amparo comparte que “los materiales son estupendos”, que están “bien seleccionados los textos, la música, los vídeos” y, además  “los facilitadores lo hacen genial”. Y M.ª Luisa dice que solo tiene “palabras de gratitud. Gracias, gracias, gracias por el bien que me hace asistir a los encuentros del programa. Miro atrás, veo cómo estaba, cómo estoy y sólo puedo decir ¡GRACIAS!”

“El cambio hacia una vida alegre y plena, en las personas que llegan/llegamos tan atravesadas por el dolor y desconcertadas, es un regalo y me hace seguir comprometido con esta apuesta de la IT. Ojalá la Iglesia diocesana se abriera a estas propuestas de acompañamiento y sanación.”

Francisco Campos, facilitador del programa

Un ‘perol’ de convivencia en El Higuerón

El programa contempla encuentros de grupo y encuentros de varios grupos en momentos clave del proceso. En Córdoba, además de este tipo de reuniones, los grupos SEPAS celebran encuentros festivos, salidas culturales en la ciudad y otras de convivencia (senderismo, ir de tapas o a espectáculos de la ciudad).

El día 28 de octubre, con motivo de la festividad de San Rafael, se reunieron 18 personas de los tres grupos SEPAS de Córdoba. Prepararon y degustaron el tradicional perol en la casa de María Luisa, del grupo SEPAS II, en El Higuerón, Córdoba. Allí compartieron con los amigos y los hijos de algunas personas del programa y celebraron los avances del programa. Fue una gran ocasión para fomentar la interrelación de los grupos, disfrutar de la amistad en espacio festivo: juegos,  bailes, comida, bromas… ¡No todo va a ser pérdida tras la ruptura!

M.ª Luisa, la anfitriona, confiesa: “Para mí ha sido un disfrute ver mi casa llena de vida. Hacía mucho que no la veía así. Gracias a todas la personas por aportar alegría, colaboración, ánimo, ganas de disfrutar. GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.” Y recibió innumerables manifestaciones de gratitud por su acogida, “simpatía y cariño”.

Fue una alegría “echar un día rodeados de buenas personas y con adultos que se adaptan tanto y tan bien a los niños, dice Alfonso. Y Conchi da gracias “por este bonito encuentro, a los organizadores, a M.ª Luisa por poner a disposición su casa, a todos los que habéis podido venir… Y a mis ‘primos’ Concha y José por haber venido cargados de instrumentales; a los peques con su encanto e ilusión… ¡¡Qué bien lo hemos pasado!!” Carmen agradece a todos “por formar parte de mi vida”.

Concha y José Antonio, invitados a este encuentro, se manifestaron así: “Muchas gracias por la  acogida. Sois un grupo alegre, agradable, acogedor, con mucha resiliencia y se aprende mucho a vuestro lado. Gracias por un maravilloso día.”

Gracias a esta iniciativa de la pastoral de familia de la IT de Córdoba los grupos SEPAS vivieron y festejaron la vida y la recuperación tras la ruptura de pareja. Así ofrecieron un clima de familia a sus hijos e hijas.

“Muchas gracias a todas las personas que han hecho posible este día: desde quienes  han aportado su casa, las que pusieron sillas y mesas, quienes han cocinado o comprado la comida; a los pinches, a los niños y niñas que nos han alegrado y dado vidilla; por supuesto a los papas y mamás que han gestionado muy bien la incorporación de los peques; a quienes animaron los juegos, los bailones. Y gracias a Dios por habernos puesto en conexión.”

Francisco Campos

Por Información IT España