“Me llevo la importancia de continuar nuestra labor como docentes desde un enfoque humanista, inclusivo y transformador”, expresó una participante en la valoración final. Con el lema Educadores para una sociedad más humana en la era de la inteligencia artificial, se celebró el III Encuentro nacional de Jóvenes por la Educación.
Provenientes de diferentes grupos locales, 19 jóvenes reflexionaron y avanzaron en la misión educativa en un mundo cada vez más dominado por la tecnología. Les acompañaron en la experiencia cuatro personas del Equipo Dinamizador y cinco animadoras. Santa María de Los Negrales recibió al grupo del 18 al 20 de octubre de 2024.
El momento de acogida estuvo preparado por el grupo de Barcelona (que no pudo estar presente) y el de Alcoy, quien coordinó la dinámica en el encuentro. Tres ovillos iban tejiendo la relación de cercanía y profundidad según se compartían las respuestas a las preguntas que lanzaban:
- Ovillo 1: ¿Cómo me llamo? ¿De dónde vengo? Mi color.
- Ovillo 2: ¿Qué espero de este encuentro? ¿Qué me quiero llevar?
- Ovillo 3: Mirando a nuestro mundo, nombra un signo de esperanza.
Lo que parecía una simple actividad para romper el hielo, terminó siendo una experiencia de apertura y espontaneidad donde las personas compartieron sus planteamientos y deseos educativos más sinceros, creando un ambiente de confianza desde el principio.
Paz Eskamendi y M.ª Mar Rubio, animadoras de Burgos, invitaron a “enfocar y ajustar la mirada”, a través de las miradas de niños, con un mensaje sencillo pero poderoso sobre la importancia de ser conscientes de lo que vemos.
A continuación, Mercedes Blanchard, coordinadora de Jóvenes por la Educación, dio la apertura oficial. Durante su intervención presentó los tres planteamientos fundamentales del trabajo educativo que se desarrollarían durante la jornada: Cambio hacia un Paradigma Pedagógico Socioeducativo, El desarrollo de la persona como objetivo central, Desarrollo de la sabiduría.
M.ª Dolores Martín, representante de la Institución Teresiana, ofreció unas palabras de aliento, subrayando la importancia de fortalecer este movimiento.
Elementos importantes del educador según la perspectiva de Pedro Poveda
Margarita Bartolomé presentó algunos rasgos que definen a Poveda como educador y los que él, desde la reflexión y la práctica, considera importantes en los educadores. Posteriormente hubo un trabajo de grupos para señalar cuáles de estos rasgos se consideraban claves en la era digital y cuáles habría que añadir.
Se señalaron como significativos los siguientes: “conciencia de nuestra vocación”; “ojos bien abiertos para descubrir lo que la realidad nos ofrece: posibilidades y límites”; “un horizonte de sentido”; “competencia en el desarrollo de la profesión educativa y actualización permanente”; “respeto profundo a las personas a las que se orienta la acción educadora”; “capacidad para trabajar con otros” y, finalmente, unos valores muy necesarios: “orden”, “sencillez en los medios”, “creatividad y sentido del humor”, “paciencia y perseverancia en los procesos”. Y todo salpicado de “alegría”.
El perfil del educador en el contexto actual
En un segundo momento, para motivar el proceso de reflexión-acción que se llevaría a cabo en los grupos, M.ª Dolores Valencia hizo una breve aproximación al tema Perfil del educador para este tiempo. Durante la exposición se entabló un diálogo con los jóvenes que fue abierto, rico y muy participado.
El educador en la era digital
M.ª Dolores Muzás y Mercedes Blanchard dinamizaron el tercer momento del encuentro. Dirigieron al grupo preguntas para el compartir y la reflexión. ¿Qué te provoca la entrada de la inteligencia artificial (IA) en educación? ¿Qué educador es el que tiene que conducir al alumnado en esta era digital?
M.ª Dolores hizo un repaso rápido por la historia de la IA comenzando por la década del 40 al 50 y sus aportaciones más significativas, hasta nuestros días con la presencia de la IA en la vida cotidiana, la invasión del Chat GPT y el crecimiento de las interacciones humano-máquina.
Se plantearon una serie de reflexiones sobre la realidad que ayudaron a entrar en la pregunta: ¿Cuál es el impacto de la tecnología en los niños y jóvenes de hoy? A continuación se señalaron cuestiones que les interpelan como educadores: “dependencia emocional de los dispositivos”; “exceso de tiempo frente a las pantallas”; “desconexiones sociales”; “menos contacto cara a cara”; “desigualdad social tecnológica”; “falta de concentración en los niños y jóvenes”, entre otras. Pero son cuestiones que se convierten para los educadores en “desafíos cognitivos, desafíos emocionales, desafíos en nuestras relaciones, desafíos a nuestra creatividad, a nuestra imaginación, a la capacidad para la resolución de conflictos, desafíos al desarrollo de la salud mental, a las adicciones, a la ansiedad y el estrés”.
Ante tanto desafío, surgió la pregunta: ¿Qué se le pide al profesorado? A la que se dieron estas respuestas: 1) formación, formación y formación; 2) diálogo y cercanía a nuestros niños y jóvenes, acompañamiento, hacer seguimiento.
¿Y qué formación necesita este educador? La reflexión provocó un diálogo interesante: “desarrollo del pensamiento crítico”, “el gusto por investigar y seguir aprendiendo”, “la empatía y las relaciones sociales”, “ética y responsabilidad en el uso de la tecnología”, “creatividad e innovación”, “preparación en el manejo de nuevas herramientas tecnológicas que suponen una ayuda para el desarrollo del aprendizaje”.
Festival del educador
Para finalizar la sesión, Mercedes pidió a los participantes, distribuidos en grupos, que elaborasen una canción, un vídeo, un poema, una pintura… relacionada con la temática del ‘educador’. Tendrían que utilizar herramientas de IA (Suno, Invideo, Chat GPT). Cada grupo elaboró un producto y lo presentó en el Festival del educador en el que participaron todos los grupos, incluido el Equipo Dinamizador.
Se invitó a los participantes a estudiar y reflexionar sobre lo que la IA provoca en su interior; qué inquietudes e interrogantes, reflexiones y procesos provoca. Y se les animó a afrontar el tema de trabajo del próximo curso en los grupos locales desde la práctica y vida reflexionada en el encuentro.
Después de la presentación de trabajos en el Festival, se procedió a la entrega de premios a todos los participantes que consistió en una taza con el logo de Jóvenes por la Educación y un libro con frases de Pedro Poveda. La fiesta terminó compartiendo productos de cada lugar y comentando los acontecimientos del día y la satisfacción por el trabajo hecho.
¿Qué me llevo?
El último día comenzó con la reflexión preparada por Burgos. La jornada se dedicó a la evaluación y a compartir informaciones. De la valoración recogida por el Equipo Dinamizador destacamos algunos testimonios de los participantes:
Me llevo el ejemplo de la entrega con amor a una vocación. Los contenidos que me tocaron como persona son más que los contenidos expuestos ya que observo las formas de vida de las teresianas, la pasión por su vocación y el amor; las canciones y el ambiente forman parte de toda la experiencia profesional y de vida que he aprendido en estos días.
Vuelvo a marcharme con las pilas cargadas y con una perspectiva mucho más optimista respecto a la temática que hemos abordado. Me llevo ganas de continuar investigando las posibilidades ventajosas que ofrece la inteligencia artificial. Y con el reto de encontrar la manera de concienciar a la sociedad de lo que pueden ganar y perder con su uso. He disfrutado de la reflexión con mis compañeros de sus puntos de vista y experiencias.
Me llevo la importancia de continuar nuestra labor como docentes desde un enfoque humanista, inclusivo y transformador.
El entusiasmo por la educación, compartido con otros, la experiencia positiva del uso de las tecnologías y de la IA, poniendo el sello humanizador, el ‘alma’.
Me apunté en el curso con muchas reservas sobre la utilidad de la inteligencia artificial en el ámbito educativo. Después de lo vivido con mis compañeros tengo una opinión más positiva, creo que puede ser una gran aliada en nuestro proceso de enseñanza aprendizaje.
Los jóvenes han valorado positivamente la “unión y comunicación entre los participantes”, la “participación” y consolidación del grupo, “las actividades tan dinámicas organizadas”, la posibilidad de “interaccionar con gente que tiene pasión por la educación”, “el entusiasmo, la alegría, la profundidad de las aportaciones, el deseo de seguir caminando en esta línea”. Y alguien expresa que este encuentro le ha servido para “reafirmarme de nuevo” que me encanta la Institución Teresiana y saber que por el camino que voy es el correcto, siguiendo siempre los pasos de Pedro Poveda”.
Se informó sobre la presentación de Jóvenes por la Educación en Covadonga por parte de Inmaculada Peinado y Alvaro Mestre, pertenecientes a los grupos de Córdoba y Alicante en el 29 de septiembre de 2024.
Se anunció que del 5 al 8 de febrero de 2025 tendrá lugar el Congreso Humanizar la Educación en la Era de la Inteligencia Artificial y se animó a participar.
En la prospectiva sobre los encuentros del año, se confirmó la necesidad de tener contacto, presencial y virtual, de todos los grupos locales de Jóvenes por la Educación para seguir fortaleciendo la red del movimiento.
Me ha gustado repasar de nuevo la experiencia. Es una experiencia intergeneracional muy positiva para mí, pues me descubro aprendiendo de todos y creo, por como se expresaban, que también lo es para los demás. Agradezco esta oportunidad que se nos brinda.