Entendemos la educación y nuestros centros como espacios de cuidado. Hoy presentamos dos aspectos importantes: el acoso escolar y la alimentación saludable. La Red de Centros Educativos de la Institución Teresiana entrevistó a dos profesionales que trabajan en sus colegios: Miguel Ángel, psicopedagogo, y Ana María, nutricionista.
El acoso escolar en las nuevas generaciones
El acoso escolar es uno de los grandes problemas a los que nos enfrentamos como sociedad. A raíz de la pandemia, el bullying ha crecido exponencialmente. El acoso ya no se queda en las aulas y el ámbito escolar, sino que traspasa esa barrera llegando a miles de personas a través de las redes sociales.
Los colegios de la Institución Teresiana se amparan en un protocolo de actuación dirigido específicamente a este tipo de problemas. Se fomentan sesiones de sensibilización tanto para profesores como para alumnos. Se cuenta con el apoyo de organismos públicos, como la Policía Nacional, quienes conciencian sobre la importancia de ayudar a las personas que sufren acoso e informan sobre las consecuencias legales que tiene el cometer este tipo de actos.
Miguel Ángel, psicopedagogo de uno de los centros, explica que se ponen en el centro a la víctima, pero también al acosador. Se procura que el acosador sea consciente y vea que tienen muchos ojos sobre él. También se trabaja con las personas ‘pasivas’ (ven pero no actúan) para que tomen conciencia de su complicidad cuando no denuncia estos hechos. Callar, permitir, excluir… son también formas de acoso.
Más información en el Blog de Red Centros IT.
Alimentación saludable
Aprender a comer bien y a cuidarse desde la infancia nos permite tener una vida mejor y evitar o paliar ciertas enfermedades. Por eso, es importante que desde los propios centros educativos se cuide la alimentación del alumnado. Cada vez es más importante que los colegios cuenten con la figura de un nutricionista que ayude a elaborar el menú escolar y asesore tanto a los alumnos como a los padres.
Ana María Expósito Sierra trabaja como nutricionista en el colegio Padre Poveda de Guadix. Al principio del curso elabora un menú escolar y, a lo largo de cada trimestre, visita el centro para comprobar que el menú implantado se lleva a cabo de forma exitosa. El éxito dependerá fundamentalmente de la unión que haya entre el equipo directivo, la asociación de padres y madres, los responsables de cocina y el profesional nutricionista. “En el colegio Padre Poveda, donde trabajo, tanto el equipo directivo como los responsables de cocina han estado comprometidos en todo momento al 100 % y han ejecutado tal cual las pautas que yo recomendé”, afirma Ana María.
Destaca tres criterios para elaborar el menú. En primer lugar, la temporada del año con platos de temporada, adaptados a los meses de invierno o de verano. Los gustos de los usuarios del centro, pues se trata de que les guste lo que comen, como segundo criterio. Y por supuesto, el criterio fundamental: la salud. En el ‘Plato saludable’ aparece un 50 % de verduras; un 25 % proteínas de calidad, como la carne, el pescado, el huevo y la legumbre; y el 25 % restante de hidratos de carbono de calidad en forma integral, que serían el pan, la pasta y el arroz.
Para Ana María, el objetivo es que los niños no tengan deficiencias a nivel energético, es decir, de calorías; que no haya deficiencias a nivel nutritivo y tampoco de cantidad. En el menú siempre pongo dos platos completos porque sé que habrá niños que acepten mejor el primer plato y otros que aceptarán mejor el segundo; para evitar que tengan carencias se ofrecen dos platos completos.
La dieta escolar es importante pero luego influye mucho lo que se come en casa. Por ello, Ana María tiene encuentros formativos con alumnos de distintas edades, con los padres y profesores: cuántas comidas al día, el desayuno, alimentos que se deben evitar, el problema del sobrepeso… Y lo más difícil de afrontar: comer bien y saludablemente se ha puesto mucho más caro.
Toda la entrevista a Ana María en el Blog de Red de Centros IT.
Por Red de Centros Educativos de la IT
Magnífico que deis a conocer lo que vais haciendo en los Centros. Y, por favor, no os canséis de hacernos llegar, todo lo bueno.
Desde Terrassa, un abrazo repleto de ÁNIMO y GRATITUD, por vuestra hermosa y sustancial tarea.