La incertidumbre creada por la guerra de Ucrania y otras guerras, aunque más silenciadas…, la perplejidad, la indignación y la inseguridad provocada en la ciudadanía por la vulneración impune de los Derechos Humanos, generando pérdidas de vidas, movimientos migratorios, campos de refugiados y una brecha económica cada vez más profunda… está haciendo mella en la salud integral de las personas y en su equilibrio emocional.

Todo ello unido a la pandemia de la que todavía no hemos salido y a la inflación galopante que se deja sentir en la cesta de la compra y en los servicios básicos hacen que las emociones negativas se multipliquen. La ‘salud emocional’, expuesta al miedo, a la ansiedad, es una de las dimensiones de la salud que ha sido afectada.

La sabiduría de hacer frente a los desafíos de la vida

El ‘bienestar emocional’, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es un “estado de ánimo en el cual la persona se da cuenta de sus propias actitudes, puede afrontar las presiones normales de la vida, trabajar productivamente y contribuir a la comunidad”. Las personas emocionalmente saludables suelen tener la sabiduría de manejar adecuadamente sus pensamientos, sentimientos y comportamientos. Son capaces de hacer frente a los desafíos de la vida, mantener los problemas en perspectiva y recuperarse de los contratiempos.

El manejo del mundo emocional es una de las claves para humanizar nuestra vida cotidiana y nuestro mundo relacional. Las emociones positivas como la alegría, el optimismo, la felicidad y el amor son un beneficio para la salud, ayudan a soportar las dificultades de una enfermedad y facilitan su recuperación. Las emociones negativas, como el odio, el miedo, la depresión, la ira, la rabia y el estrés, entre otras, bloquean nuestras defensas naturales.

Es tiempo de estar atentos

Estamos en un tiempo que nos invita a estar atentos a nuestra interioridad, a las personas con las que vivimos y nos relacionamos, con nuestras comunidades de vecinos, con lo que sucede en el país, en el continente, en la globalidad del mundo. Somos seres interdependientes dónde lo que sucede en una parte del mundo repercute como efecto mariposa en todo el planeta.

Tercer diálogo: Cuidados y salud emocional

En este contexto, el equipo Humanizando la Salud, de la Institución Teresiana en España, ofrece el 28 de este mes un encuentro sobre Cuidados y salud emocional. Es el tercer diálogo de los cuatro que propone el ciclo sobre ‘Salud Integral’ que se ha venido desarrollando en noviembre de 2021 y febrero de 2022.  El 16 de mayo tendrá lugar el cuarto y último diálogo sobre Cuidados y Salud Espiritual.

Para inscribirse, rellene el formulario de inscripción.

La Institución Teresiana, desde su espiritualidad cristiana y su estilo de estar en un mundo diverso y global, propone un enfoque humano y espiritual dirigido al bienestar holístico de la persona y al compromiso de colaborar con otros a crear sociedades más justas y fraternas.

En tiempo de guerras, gritemos por la paz

Quien hace la guerra olvida a la humanidad. No parte de la gente, no mira la vida concreta de las personas, sino que antepone los intereses y el poder. Confía en la lógica diabólica y perversa de las armas. Y se distancia de la gente común, que desea la paz, y que en todo conflicto es la verdadera víctima que paga sobre su propia piel las locuras de la guerra. Pienso en los ancianos, en cuantos buscan refugio, en las mamás que huyen con sus niños…

Con el corazón desgarrado por todo lo que sucede en Ucrania —y no olvidemos la guerra en otros lugares del mundo, como Yemen, Siria, Etiopía—, repito: ¡que callen las armas! Dios está con los operadores de paz, no con quien emplea la violencia. 

Papa Francisco, 27 de febrero de 2022.

Por Equipo Humanizando la Salud

Imagen de Alexandra Koch en Pixabay