En el aniversario de la aprobación diocesana de la IT en 1917, recordamos algunos fragmentos de una exposición oral de Pedro Poveda que lleva por título Nuestra Obra es una idea buena, del 26 de agosto de 1924.
“La Obra es una idea buena. ¿Por qué? Porque es grata a Dios. ¿Por qué es grata a Dios? Porque él la inspiró, la ayudó, la selló con su sello, la defendió y, por último, la aprobó por medio de la Iglesia […]
“La Obra es buena, la inspiró Dios. No se trata aquí de una inspiración extraordinaria, sino de una inspiración que no puede decirse que es humana, puesto que aquello que se concibe para bien de las almas es más que humano siempre. Es obra de la gracia de Dios, lo cual no quiere decir que la persona que la concibió fuera buena […]
“La Obra es buena, oímos decir constantemente; lo dice la gente, lo dice todo el mundo. ¡Cómo la favorece Dios! Humanamente no se explica: sin recursos, sin personal, sin prestigio científico; una novedad, una cosa rara… […]
“No solo la ayudó con recursos y medios de todo género de cuantos eran precisos, según los planes de la Providencia, sino que la selló con la persecución de los malos y de los buenos […]
“Es buena, porque tiene virtualidad bastante para producir frutos saludables, por su fin, por sus medios, por la oportunidad, por la adaptación […]
“Es buena la Obra porque cuesta mucho (casi no quisiera tocar esto) sólo Dios lo sabe […]
“Ved el misterio que se os ha dado, ved la misión que se os confía.”
Pedro Poveda, Creí, por esto hablé, [201]
