Oración y estudio: dos claves estrechamente relacionadas entre sí que desarrolla Carmen Aparicio en esta nueva sesión online del Seminario Claves de acompañamiento en Pedro Poveda.
El encuentro del fin de semana 16-17 de enero sigue la misma pauta de los anteriores, que incluye la presentación del tema central, la puesta en común del trabajo realizado desde octubre, los grupos de contraste y la aproximación a Pedro Poveda acompañante a través de sus cartas, además de tiempos de oración. En esta sesión se inicia el trabajo del Libro del Castillo interior de Santa Teresa, abordando las tres primeras moradas. Especiales es la película comentada, en la que se van encontrando elementos que iluminan el hacer de quien acompaña.
La puesta en común del tema central del encuentro de octubre, que tiene como núcleo el texto que en 1915 escribe Pedro Poveda sobre el Crucifijo[1], es una enriquecedora experiencia que ayuda a profundizar en la llamada a ser Crucifijos vivientes, otros Cristos que miran la realidad desde Él y como Él, especialmente a los crucificados de nuestro mundo.
Oración y estudio al servicio del acompañamiento
Carmen Aparicio aborda el tema central de esta sesión, La oración y el estudio al servicio del acompañamiento en la fe, que va desarrollando a través de textos de Pedro Poveda sobre ambos temas, distribuidos en tres etapas. “Espíritu de oración y espíritu de estudio”, comenta, están presentes en ellas como elementos constitutivos del carisma de la Institución Teresiana y de sus miembros; según Arancha Aguado, ambos, “oración y estudio, estrechamente relacionados entre sí, ya que se trata de dialogar con Dios desde la realidad humana y estar inmersos en ella desde la experiencia de Dios”. En los textos del Fundador, hay un hilo conductor y también peculiaridades en cada una de las etapas. Carmen nos invita a releerlos en clave de acompañamiento para descubrir en ellos elementos importantes “para la formación en el espíritu teresiano”.
En relación a espíritu de oración: despertar el deseo, relación oración-vida cotidiana, actitud de búsqueda, invitación a “entrar en el centro y allí hacerse preguntas”, identificar los sentimientos, perseverancia en el ejercicio de la oración, para la que indica medios concretos, crecer en la consciencia de vivir en la presencia de Dios, conocimiento propio a la luz de Dios, mantenerse fiel en las dificultades, ir encontrando los recursos que más ayuden, buscar acompañamiento espiritual, discernimiento de los frutos de la oración que llevarán a una transformación de la realidad a la escucha de Jesús en el cotidiano, en clave de misión y de fraternidad, y a reaccionar como él en tiempos de adversidad; “aprender a descubrir la novedad de Dios”, enfoque de proceso genuino de cada persona, en el que ir cultivando actitudes de fe, confianza, abandono, agradecimiento…, transmitir a otros el gusto por la oración…
En relación al estudio, Poveda señala elementos similares, significativos en una época en la que la mujer apenas accedía a la esfera social: la constancia y la adquisición de hábitos, estudio como preparación para entrar en diálogo con la realidad con criterio y tendiendo puentes, y no una mera adquisición de conocimientos o competencia profesional, sino ir forjándose en una “actitud ante la vida”, estando “atentos a lo que sucede en el mundo” y poder discernir; hacer amable el estudio, vivido también como ascética de amor; buscar los medios adecuados con consciencia clara de que “el estudio es imprescindible para la misión”…
Para Poveda el espíritu de oración y el espíritu de estudio serán elementos de discernimiento de la vocación.
Tras la intervención de Carmen, se comparten ecos espontáneos de valoración y estímulo a seguir profundizando en el carisma y la vocación, releyendo los textos con una nueva luz.
Cartas de Poveda a Magdalena Martín Ayuso
La aproximación a Pedro Poveda acompañante es hecha en esta ocasión de la mano de Magdalena Martín Ayuso, con quien mantiene una rica y prolongada correspondencia. A través de estas cartas la va estimulando a un crecimiento integral para el Reino, en los sucesivos momentos de su vida: primero como estudiante, más adelante en el discernimiento de su vocación en la naciente Obra de las Academias, en su compromiso progresivo y en las responsabilidades institucionales que va asumiendo. La lectura de las cartas y el propio testimonio de Magdalena reflejan un modo cercano, respetuoso y estimulante de acompañamiento.
Una estrella muestra el camino
Al inicio del encuentro, el texto de Josefa Segovia sobre la vocación es invitación a ahondar en el carisma. La estrella de la vocación despierta el deseo, muestra el camino, lleva a una entrega y conduce al encuentro con Jesús en la realidad, marcada en este tiempo por la incertidumbre. Después de día y medio de encuentro comunitario con la tradición espiritual de la IT, van resonando los ecos de los aspectos de la vocación que se han avivado e iluminado: “espíritu de oración y estudio”, “vivir de corazón el presente”, “con otros y para otros”, “oración-amor fraterno”, “gratitud por el don recibido”, deseos de “seguir ahondando” de la mano de Pedro Poveda y Teresa de Jesús, interpelación, esperanza renovada, llamada a la “perseverancia”, mirar nuestro mundo desde el Crucificado, fortalecer los vínculos comunitarios…
En las palabras está presente el agradecimiento al equipo que facilita la experiencia, acogida por cada participante como regalo.
Por Estrella Mª Sendra
[1] “La mirada al crucifijo es relevante medio pedagógico para el fin… produce un estado afectivo, capaz de inspirar y sostener la actividad necesaria para formar un carácter”. Pedro Poveda. Creí por eso hablé [73] (1915).
