Durante los días 14, 15 y 16 de mayo 2019 se ha desarrollado en el Centro Cultural Almar de la IT en Málaga, el trigésimo sexto Ciclo de Conferencias, con el título “Ética de los cuidados: El cuidado de la persona y su medio” organizado en colaboración con la Cátedra Pedro Poveda y la Asociación Educación y Cultura.
Al presentar el Ciclo, Carmen Mora, del equipo organizador, dijo que la ética del cuidado forma parte del debate sobre los valores y sobre cómo debemos conducirnos para avanzar en el camino hacia una sociedad mejor que la que estamos construyendo.
Indicó que la intención, y el deseo, al convocar este Ciclo de Conferencias es brindar un espacio de reflexión a personas relacionadas con la Institución Teresiana en Málaga, y a la sociedad malagueña en general. Una oportunidad de “ofrecer elementos que nos permitan formar criterios y despertar la conciencia del compromiso mutuo, y la responsabilidad de contribuir a crear una sociedad más justa y solidaria, y un mundo más habitable, que vaya a favor de quien más pueda necesitar”.
El Ciclo se ha desarrollado con una Mesa redonda de inicio, a la que han seguido dos conferencias.
El cuidado y el dolor
Con el título “Cuando llega la fragilidad. Cuidado de la vida humana”, en la mesa redonda presentada y moderada por Consuelo Gámez, miembro de la Cátedra Pedro Poveda, intervinieron una médico, un jurista y un psicólogo.
Maribel Carrasco Zafra, médico de Cuidados Paliativos en la Fundación CUDECA. Desde la convicción de que “la vida sigue siendo vida hasta el final” desarrolló cómo acompañar y cuidar el final de la vida y cómo ofrecen cuidados paliativos desde la fundación CUDECA. Nos decía que procuran mirar a la persona en su realidad global; ofrecen una atención integral y cuidan la dimensión física, espiritual, emocional y social. Con el propósito de añadir no días a la vida sino vida a los días…
Francisco Arroyo Fiestas, Magistrado de la Sala de lo Civil del Tribunal Supremo planteó algunos aspectos jurídicos de la Proposición de Ley de Eutanasia. La obligación de respetar la vida, la dignidad y la libertad de la persona. En su opinión, el horizonte que se vislumbra es que la muerte por eutanasia, en situación final, sea considerada legalmente, en un futuro no muy lejano, como muerte natural. Y, en tono coloquial, indicó la conveniencia de que, cuando aún estamos lúcidos, hagamos nuestra propia declaración de “voluntad vital anticipada” para que pueda ser respetada por los facultativos y la familia en su momento.
Juan Antonio Mora Mérida, Catedrático de Psicología Básica de la Universidad de Málaga, planteó la dimensión antropológica del dolor. Insistió en que cada persona tiene su propia vivencia del dolor. Y desarrolló la diferencia entre dolor y sufrimiento. Terminó su intervención ofreciendo algunos consejos para manejar el dolor, entre ellos, mantener la curiosidad intelectual y la vida social y evitar conversaciones tóxicas sobre el dolor.
Trabajar es continuar la creación
Al día siguiente, José Luis Fernández Orta, miembro de la HOAC y del Grupo Nacional de Formación de la HOAC ofreció sus reflexiones sobre “El trabajo ¿fuente de vida y dignidad?”. Afirmó que “las cosas valen y tienen un precio, pero las personas valen… y no tienen -no deben tener- un precio”. El trabajo no es “digno o indigno”, la dignidad está en la persona. El trabajo es decente o indecente.
En su exposición siguió la metodología de ver-juzgar-actuar, y añadió: celebrar y también descansar, a imagen de Yahvé en el Génesis. Nos decía que la finalidad del trabajo, a veces, se pierde de vista cuando se trabaja solamente para ganar dinero… y no para realizarnos como personas y continuar la obra creadora de Dios. El trabajo hay que definirlo, no sólo como un modo de hacer sino de hacernos a nosotros mismos.
Citando a Juan Pablo II comentó que el trabajo ayuda a transformar la sociedad y satisfacer las necesidades. Desarrolló también el sentido del trabajo como el resultado de la actividad humana acumulada a lo largo de la historia por la humanidad y la diferencia entre trabajo y empleo; por ejemplo, el empleo termina con la jubilación… el trabajo puede que no.
Cuidar la creación de modo propositivo
En la sesión del último día, Jaime Tatay Nieto sj, profesor de Ecología, Ética y Doctrina Social de la Iglesia en la Universidad Pontificia Comillas, habló sobre “Cómo estamos construyendo la casa común”, la relación entre Religión, Ética y Ecología. Decía que el concepto de cuidado ha tenido una expansión que ha ido incluyendo desde uno mismo, el otro, el futuro y lo no humano.
La ética y las religiones se han encontrado con muchas realidades que les han obligado a repensar muchos de sus postulados. La conciencia ecológica y el cuidado de la casa común en las religiones ha evolucionado a lo largo del tiempo, desde la reacción defensiva a la reflexiva y propositiva. Siguiendo la encíclica Laudato si del Papa Francisco, desarrolló los modos teologales de cuidar la creación.
Al concluir estas tres jornadas de interesantes aportaciones de los ponentes, con diálogo y participación de las personas que asistieron, Carmen Mora, del equipo de la Institución Teresiana en Málaga, cerró el Ciclo agradeciendo a la Cátedra Pedro Poveda y a la Asociación Educación y Cultura su apoyo para desarrollar esta actividad.
Centro Cultural Almar.
Málaga, 22 de mayo 2019.
