El grupo de voluntariado que apoya el proyecto Rajab de la IT en Jaén se ha reunido para evaluar el curso, programar… y renovar el compromiso de ser puentes entre personas y pueblos.
Iniciamos el curso escolar 2018-2019 con la imagen del puente. Un puente es lo contrario a un muro. Los muros separan y dividen, sembrando dolor y muerte. Los puentes unen, decíamos en aquel momento.
Y en el proyecto Rajab, siguiendo las huellas de Pedro Poveda, queremos ser también hoy constructores de puentes. Queremos ser puente.
Con este deseo, unido al compromiso y esperanza, el voluntariado Rajab nos hemos dado cita el sábado 11 de mayo, en un pequeño rincón de Sierra Mágina: Pegalajar.

Ha sido una parada en el camino para contemplar nuevamente el trazado de puentes de comunicación y diálogo, construcción conjunta tejida en complementariedad
Rajab quiere ser puente que une caminos y acerca países.
Puente de encuentro entre personas humanas de Senegal, Nigeria, Mali, Marruecos, Sahara Occidental, Guinea, Camerún, Pakistán, Turquía, Georgia, Rumanía, España…
Ser puente que busca soltar cadenas de opresión y de muerte.
Puente de solidaridad, de mesa compartida y búsqueda de la justicia, cimiento de la verdadera paz.
Después de este alto en el camino, de nuevo a la tarea.
Nuestro ser entero, cabeza, pies y manos, en el trazado de puentes con otras personas y grupos y en cada puente trazado, el corazón lleno de nombres.
Equipo Rajab.
Jaén, 11 de mayo de 2019.